jueves, 19 de marzo de 2020

Nº 90 - Otoño 2020

Billy Bond


Letras en el Rock Argentino  
Tontos

Billy Bond y  La Pesada

Existen tontos, tontos
Tan, tan solo tontos

Ya sean hippies, hippies
O tipos de chalecos cortos

Existen tontos, tontos
Tan, tan solo tontos

Ya sean hippies, hippies
O tipos de chalecos cortos

Tontos que ensucian la sangre a otros
Tontos que chupan la sangre a otros
Tontos que tienen la sangre
De todos los tontos

(del Cd: Tontos(Operita)- 1972)

Giuliano Canterini, mejor conocido como Billy Bond o El Bondo, es un músico italiano nacionalizado argentino, considerado como uno de los pioneros del rock argentino. Fue cantante de Billy Bond y La Pesada del Rock and Roll y copropietario y gerente del local La Cueva, que conformó las raíces de nuestro rock junto a Moris, Javier Martínez, Miguel Abuelo, Litto Nebbia y Pajarito Zaguri. A fines de la década del ´60, frecuentaba los boliches "La Perla"  donde se encontraba con Manal, Vox Dei, Los Gatos, Los Beatniks y Tanguito.
Naciò en La Spezia, Italia.

Cristian Cabral

Naufragio

La madrugada insomne despabila
la sangre adormecida y fulgurante,
y recorre este sueño vigilante
que se quedó clavado en mis pupilas.

En su reloj oscuro se perfila
un vagón de fantasmas delirantes;
dirigen sin saber mi vida errante
con paso despiadado que aniquila.

No quedará más nada de aquel plagio
en esta soledad que me rodea
sumergido en el mar de los adagios.

Solo seré la luz de algún presagio,
la vaga sensación de alguna idea,
los restos esparcidos del naufragio.

Escarcha

Andar tras de la escarcha y en su fuego,
subido al escondite de las horas.

Como si las desgracias no existieran
o fuesen solo risas sin angustia,
como si no bastara esta sal inundando nuestros ojos
cuando nos duele el cielo
o la cara mugrienta de la noche.

Andar tras de la escarcha y en su fuego,
teniendo la certeza
de que morir
es trascender su quemadura.

 Poeta.
Cosquìn (Còrdoba) Argentina

Italo Calvino

Las ciudades y los intercambios.

A ochenta millas de proa al viento maestral, el hombre llega a la ciudad de Eufemia, donde los mercaderes de siete naciones se reúnen en cada solsticio y en cada equinoccio. La barca que fondea con una carga de jengibre y algodón en rama volverá a zarpar con la estiba llena de pistacho y semilla de amapola, y la caravana que acaba de descargar costales de nuez moscada y de pasas de uva ya lía sus enjalmas para la vuelta con rollos de muselina dorada. Pero lo que impulsa a remontar ríos y atravesar desiertos para venir hasta aquí no es sólo el trueque de mercancías que encuentras siempre iguales en todos los bazares dentro y fuera del imperio del Gran Kan, desparramadas a tus pies en las mismas esteras amarillas, a la sombra de los mismos toldos espantamoscas, ofrecidas con las mismas engañosas rebajas de precio. No solo a vender y a comprar se viene a Eufemia sino también porque de noche, junto a las hogueras que rodean el mercado, sentados sobre sacos o barriles o tendidos en montones de alfombras, a cada palabra que uno dice -como “lobo”, “hermana”, “tesoro escondido”, “batalla”, “sarna,”, “amantes”- los otros cuentan cada uno su historia de lobos, de hermanas, de tesoros, de sarna, de amantes, de batallas. Y tú sabes que en el largo viaje que te espera, cuando para permanecer despierto en el balanceo del camello o del junco se empiezan a evocar todos los recuerdos propios uno por uno, tu lobo se habrá convertido en otro lobo, tu hermana en una hermana diferente, tu batalla en otra batalla, al regresar de Eufemia, la ciudad donde se cambia la memoria en cada solsticio y en cada equinoccio.

 Periodista y escritor italiano, principalmente de cuentos y novelas
Naciò en Santiago de Las Vegas (La Habana) Cuba, el 15 de octubre de 1923-Falleciò en Siena. Italia,  el 19 de septiembre de 1985.
Admirado en Gran Bretaña, Australia y Estados Unidos, fue el escritor italiano contemporáneo más traducido en el momento de su muerte.
Publicò:  Nuestros antepasados (1952–1959) la colección de cuentos de Las cosmicómicas (colección de cuentos); Ciudades invisibles (novela); Si una noche de invierno un viajero (novela)

Libros


Vuelos del alma - Retazos de vida(poemas), de Raceli Colla Pèrsico, Bialet Massè (Còrdoba) Argentina.
76 pàg.  147x210 cm.
C.E.N. Ediciones. (Còrdoba)
2017.-

            Andar hacia la hondura de los sentimientos, llevarlos
a la palabra y con las alas dl alma volar en ellas. Volar en los
cielos de la vida.

                              pàg. 5

Mariposas blancas

Lluvia de mariposas blancas,
tersa lluvia de alas dibujando arabescos
en el alma.
Mariposas blancas arrullando  rosas,
cabalgando en el aire con color
a infancia.
Traviesos arlequines simulando soles,
en la neblina sutil de
la nostalgia.
Mariposas blancas…;
despuntando otoño en el pálido matiz
de los cabellos,
en el ocre dormitar de
las pasiones.
Lluvia de mariposas blancas.
Llueven en el alma.

                                             pág. 7 


Policromía

Giro en amarillo,
con el intruso del amanecer,
que pinta  sin permiso
la pálida túnica del
alba;
y la enciende en el dorado aletear
de las mañanas.
 Giro con la sensual cadencia de
la fronda,
con el aire celeste de
la tarde,
trémulo aliento de mis versos.
Giro con la rueca de
los colores;
y toda yo…; soy la acuarela vital
del universo.

                                  pàg. 30

Mariposas

Merodean mariposas por el cauce
escarpado de mis venas.
Despierta mi alma en tenue nebulosa
del olvido.
Ruedo lento hacia el abismo
de mis pensamientos,
fondo gris de la
melancolía;
que dibuja sombras
figurando sueños,
en el sinuoso transcurrir de
lo vivido.
Desempolvo algunos y los
encuentro vivos,
palpitando entre mis dedos
tal pequeñas aves,
rescatadas del olvido.

                              pág. 39

Misterio

Los velos del misterio la envolvían.
Toda certeza se perdía en el oscuro
brillar de su mirada.
Toda ella era signo de pregunta,
un marcado interrogante.
En su andar extraño se mecía,
casi parecía que volaba,
ajena al fuego total de las miradas.
Bajo su capa de terciopelo negro,
era un esfinge extraña,
exótica flor de madrugada.

                            pàg. 70

Raceli Colla Pérsico. Poeta
Nació en Balnearia (Córdoba). En la actualidad, reside en  la localidad de Bialet Massè (Córdoba).
Ha participado de diversas antologías y revistas literarias del país y el mundo.
Publicó: Mariposas de luna

Leyendas Argentinas


Del quebracho colorado

Según se narra en esta historia, había un cacique de la tribu quichua de nombre Anka. Él era jefe de esta tribu y vivía junto a su hijo Puca-Sonko, del cual estaba orgulloso por ser un joven muy valiente que amaba a la naturaleza. Esta tribu se encargaba de la caza del jaguar, del venado y del quirquincho, sin duda alguna esta clase de vida sana y en contacto permanente con la naturaleza les proporcionaba fortaleza, destreza y habilidad. También se dedicaban a la agricultura y la pesca, sin embargo un día la paz y la tranquilidad se vio un poco alterada.

Llegaron rumores a la tribu de que se acercaban ejércitos de viracochas con el propósito de conquistar aquellas tierras, el jefe Anka lamentaba que su hijo aún era muy joven para luchar. Sin embargo, lo invitó para que ayudará en la resistencia y en la lucha, porque era muy valiente. Así es que todos tomaron sus armas y escudos, y sin titubear salieron a pelear contra los viracochas. Como conocían bien la selva los pudieron vencer, ciertamente el estar en contacto permanente con la naturaleza los salvó.

De esta manera, se recobro la tranquilidad en la tribu quichua durante un buen tiempo. Pero no pasó mucho tiempo que Anka envejeció, enfermó y murió, esta tragedia aceleró el crecimiento de Puca-Sonko. Debido a la muerte de su padre debió hacerse cargo de la tribu con todo lo que eso conlleva para un joven, de hecho no faltaría mucho para que se enfrente a verdaderos desafíos.

Paso un año aproximadamente hasta que llegaron los rumores de que los españoles iban a invadir todas sus tierras, sin dudar la tribu salio hacia al bosque para enfrentar a los enemigos que querían usurpar sus tierras. Sin embargo, observaron que los españoles traían armaduras que brillaban con el sol y poseían armas que nunca habían visto. No obstante esto, salieron con fe y valentía al campo de batalla.

Pero algo curioso sucedió, cuando pensaban que habían ganado y comenzaban a festejar con alegría, observaron a la vista un ejército de españoles. Les habían tendido una trampa o una cuartada, ante semejante sorpresa lo único que atinaron hacer fue huir despavoridos y desorientados. Pasaron algunas horas cuando se retiraron los españoles y algunas indígenas comenzaron a buscar al joven Puca-Sonko, pero tristemente lo encontraron muerto, estaba cerca de un árbol inmenso.

Cerca de su cuerpo estaba su sangre derramada pero curiosamente la base del árbol le estaba absorbiendo la sangre de Puca-Sonko y se había tornado de un color rojo, precisamente de ahí nace la leyenda de «El Quebracho Colorado».

Fuente: http://razafolklorica.com/

María Eugenia Hernández Salais


                                                            Migrantes

Un trino inesperado disipa la niebla del camino,
observa mi cansado trote peregrino, un ave gris,
de pronto emprende el vuelo. Envidio su infinito,
deseo reencarnar, volver alada.


Entonces sin fronteras o cargantes
protocolos, a cual más todos de humillantes;
veloz saeta pasaría, para entonar cantos tan gozosos
que secaran el sudor del caminante.


Vagaría en el otoño sin humores, pleno de color,
con luz brillante, y en medio del bosque,
en respetuoso silencio aguardaría
el canto acompasado del follaje.

Un canto sin apremios, como canción de cuna
que tibia el dulce sueño del infante,
y en sereno milagro, logra borrar,
los horridos sonidos de la guerra.

Tropiezo y caigo; compruebo dolorida
que el sueño terminó, estoy en medio
de una abatida multitud de Migrantes;
marchamos lerdos, en pos de la esperanza.


 Poeta, narradora.
Nacida en Ensenada, (Baja California),  México,  reside en Mazatlàn, (Sinaloa) México.
Publicó: Brumas y lejanías; Fuegos fatuos; Sirenas amarillas (narrativa), Oceánica ((breve antología bilingüe )

Dichos Populares  :  Su significado


Dormirse en los laureles
En Roma, cuando se coronaba a un general, pretor o cónsul, tras una victoria, se le colocaban guirnaldas de laureles como símbolo de gloria. Sin embargo, éstos debían agachar levemente su cabeza, por lo que daba la impresión de estar descansando sobre los laureles de la gloria. Hoy se utiliza para denotar a alguien que, habiendo alcanzado la gloria, no hizo más nada para reafirmarla.
 
Para el lado de los tomates
La planta de tomates es un vegetal problemático que suele contaminarse con todo tipo de parásitos que, si no son tratados a tiempo, no sólo matan a los tomatales sino al resto del sembradío. Razón suficiente para que los horticultores las planten bien alejadas del resto de las plantas. Es por esto que decir: «se fue para el lado de los tomates» significa algo así como decir que se fue muy lejos del significado.

Fuente: http://chubutparatodos.com.ar/

Carmen del Valle Picardo


Desarraigo

Vas llevando a tu tierra
entrañable sentimiento
y la vas derramando
                                 a gotitas
en las voces de tus recuerdos.

Vas llevando a tu tierra
en tu andar de viajero
por otros suelos que no tienen
el olor de la tierra
que llevas adentro.

Con las raíces al aire
derramando a gotitas
tus extrañamientos…Postales
de un lugar que te nombra
hijo de su suelo y sus ancestros.

Desmigajando recuerdos
en lugares que sientes ajenos
vas acariciando a tu tierra
con voz de terruño en ecos
con tu piel que huele a paisajes
cuando nombras
                  de dónde vienes, viajero.
                                                     
Tregua

No me pidas perdón.
Enséñame…
                         a reconocerte
recordándome cómo sabe el agua,
la transparencia, el manantial y la dulzura
para descubrirte
                         más allá de las rocas;
                         vertiente.
Enséñame…
A no escuchar
                        mirándote
sino a mirar;
                        escuchándote.
Enséñame…
A encontrarte,
                        alcanzándome.
A explicarte,
                        explicándome.
A perdonar,
                        perdonándome.

 Poeta
 Nació en San Salvador de Jujuy. Reside en Córdoba.
Publicò: Limón Miel y Pensamientos ; Aquí duerme mi pasado (Libro compartido con cuatro autores); Imágenes-Haikus Senryûs Tankas

Phillis Wheatley

Sobre ser traídos de África a América

Fue la misericordia la que me trajo desde mi tierra pagana,
le enseñé a mi alma ignorante a entender
que hay un Dios, que hay un salvador también:
no lo conocía ni lo buscaba, me redimió.
Algunos vieron nuestra raza azabache con ojos de desprecio,
"Su color tiene un tinte diabólico".
Recuerden, Cristianos, Negros, negro como Cain,
púlete y únete al tren angelical.

 Un himno al crepùsculo

Tan pronto como el sol abandonó el este central
el trueno repicó y sacudió la llanura celestial;
¡Esplendor majestuoso! desde el ala del céfiro,
exhala el perfume de la primavera en flor .
Suave murmullo de los arroyos, las aves renuevan sus notas,
y a través del aire su música flota mezclada

 ¡A través de todos los cielos qué tintes tan bellos se extienden!

 Pero las glorias al oeste, el rojo en lo más profundo:
Así que muchos de nuestros pechos con cada resplandor virtud,
¡los templos de vida de nuestro Dios en la tierra!

 Lleno de la gloria de aquel que da la luz,
y corre el azabache las cortinas de la noche,
que le permiten dormitar plácido, calmo, de su mente cansada,
en la mañana despierta más placentero, más compuesto;
así serán las labores de el día que comienza
más puro, más reservado de los lazos del pecado.

 Cetro de plomo de una noche que sella mis ojos soñolientos,
entonces cesa mi canción, hasta que justo se hubiere erguido la Aurora.

Fuente: https://protestantedigital.com/magacin/46632

Fue la primera escritora afroamericana en publicar un libro en los Estados Unidos. Su obra Poems on Various Subjects fue publicada en 1773, dos años antes de que comenzara la Guerra de independencia de los Estados Unidos, y es vista como uno de los primeros ejemplos de la literatura de género afro.
Naciò  en  África Occidental, el 8 de mayo de 1753. Falleciò 5 de diciembre de 1784, Boston, (Massachusetts). EE. UU.

Fue llamada Phillis, porque así se llamaba el barco que la trajo, y Wheatley, que era el nombre del mercader que la compró..
En Boston, los negreros la pusieron en venta:

-¡Tiene siete años! ¡Será una buena yegua!

Fue palpada, desnudada por muchas manos. A los trece años ya escribía poemas en una lengua que no era la suya. Nadie creía que ella fuera la autora. A los veinte años, Phillis fue interrogada por un tribunal de dieciocho ilustrados caballeros con toga y peluca.
Tuvo que recitar textos de Virgilio y Milton y algunos pasajes de la Biblia, y también tuvo que jurar que los poemas que había escrito no eran plagiados. Desde una silla, rindió su largo examen, hasta que el tribunal la aceptó: era mujer, era negra, era esclava, pero era poeta.


Visite nuestro blog
http://mapucherevista.blogspot.com
http://elrescatador.blogspot

Nos vemos en  el próximo núme 91 - Invierno  2020. 

Difunda MAPUCHE entre conocidos, instituciones culturales, medios de difusión tanto de nuestro país y el mundo. 
El material publicado en este número, es responsabilidad de sus autores.
Permitida su reproducción citando la fuente.
Mapuche recibe colaboraciones, pero se reserva el derecho y la obligación a publicar. Todas son bienvenidas, quedando a consideración de la revista Se solicitará por privado al autor y otras serán de sorpresa sin previo aviso.-
Publicación independiente de literatura, editada en la ciudad de Bialet Massè (Córdoba) Argentina

No hay comentarios: